El cantante Larry Hernández firmó hoy ante un juez del condado de San Bernardino, California su extradición voluntaria a Carolina del Sur, donde enfrentará los cargos de supuesto secuestro y agresión con agravantes.
En un traje de reo verde y atado de pies y manos, el cantante sinaloense finalmente hizo su primera aparición tras ser detenido la tarde del viernes en el aeropuerto de Ontario, California.
La audiencia fue breve, de aproximadamente cinco minutos, y el cantante contó con los servicios de una intérprete que le explicaba en español lo que se decía en la sala jurídica.
Sus familiares, especialmente su madre y hermano, lucieron muy afectados y hasta lloraron al ver a Hernández en manos de las autoridades. Su pareja Kenia Ontiveros trató de mantener la compostura y sus oscuros lentes le ayudaron a esconder un poco sus sentimientos.
Y como era de esperarse, al terminar la reunión, se armó un zafarrancho entre la familia, la prensa y las autoridades dado a que los medios querían obtener una reacción de la familia que trataba de abandonar el lugar y la policía los reguardaba para apresurar ese proceso.
Hasta el momento se desconoce cuándo y cómo será trasladado a Newberry, Carolina del Sur para continuar con los cargos que se le imputan.
En esa localidad donde se espera que pueda aprobarse una fianza mientras sigue con el proceso, la cual se calcula sería cuantiosa dada la seriedad de los cargos.