Como lo habían pronosticado las numerosas encuestas, Hillary Clinton ganó las elecciones primarias demócratas realizadas el martes en el estado. La tendencia preliminar le daba la victoria a la ex senadora por Nueva York con el 58% de los votos frente al 41% de su contrincante, el senador por Vermont Bernie Sanders.
La ex secretaria de Estado celebró su triunfo en las que han sido catalogadas como las primarias más reñidas en décadas en Nueva York, con una gran fiesta en el Hotel Sheraton, en Manhattan, a donde cientos de simpatizantes llegaron desde muy temprano el martes, antes que cerraran los centros de votación a las 9 p.m., para escuchar el discurso de victoria de la también ex primera dama.
Simpatizantes de la ex senadora por Nueva York, Hillary Clinton, llegaron de todos los rincones de la ciudad, como Mercedes García, quien a sus 52 años no quería perderse la oportunidad de tener de frente a la mujer que en los últimos años la ha convencido de ser una luchadora por los derechos de todos.
“No hay otra opción. Solo Hillary. Ella no solo es honesta y quiere trabajar por toda la gente, sino que es mujer y va a demostrar que las mujeres sabemos gobernar con pantalones”, comentó la dominicana, quien no quiso posar ante la cámara porque tiene un principio. “No quiero robarle protagonismo a nadie y mucho menos a la futura presidenta de Estados Unidos”.
Con la misma pasión, y entendiendo que la mejor manera de apoyar a un candidato es pasando de la palabra a la acción, el mexicano Raúl Serrano viajó desde Arizona para sumarse en cuerpo y alma a la campaña de Clinton en la Gran Manzana.
