Un joven de 20 años provocó ayer la muerte de diez personas al disparar indiscriminadamente en aulas de una universidad en el estado de Oregon (noroeste) antes de ser abatido por la policía, en una nueva matanza que conmueve a Estados Unidos.
El jefe de policía del Roseburg, John Hanlin, dijo que "en estos momentos podemos confirmar diez víctimas fatales en el tiroteo. Otras siete personas fueron heridas".
El funcionario policial no aclaró sin embargo si el conteo de personas muertas incluye al joven de 20 años que realizó el ataque, cuyo nombre por el momento no ha sido revelado.
Al fin de la jornada, el presidente Barack Obama lamentó que las matanzas de inocentes se hayan tornado una "rutina" estadounidense, y formuló un dramático llamado al Congreso a que acepte discutir algún tipo de legislación de control de armas.
"De alguna forma, esto se ha tornado rutina. Mi respuesta, en esta sala, se volvió una rutina", dijo Obama en la Casa Blanca, para añadir que "nuestros pensamientos y oraciones simplemente no son suficientes. Eso no es suficiente".
Las autoridades no han confirmado oficialmente la identidad ni el origen del atacante, pero la cadena CNN lo identificó como Chris Harper Mercer, de 26 años.