Santiago. La basura que se genera cada jueves en el mercado de Pueblo Nuevo comienza afectar la salud de sus residentes, quienes piden aplicar un plan de limpieza.
La recolección de los plásticos y todo tipo de desperdicios debe ser asumida por los propietarios de viviendas y de vez en cuando por barredores de la Alcaldía de Santiago. Desde la avenida J. Armando Bermúdez hasta las calles alternas son tomadas por los tres mil vendedores informales, dominicanos y haitianos.
En varias ocasiones se han iniciado procesos de desalojo, pero la mayoría ha regresado a las calles, Josefa Rosa, dice que muchos vendedores y compradores aprovechan cualquier espacio para orinar. El cúmulo de basura es tan grande, que todavía en la tarde del viernes, se ven mujeres con sus escobas quitando los desperdicios del frente de la casa o sus pequeñas tiendas.
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