El alcalde de esta ciudad, Abel Martínez, en una medida que los afectados califican de muy impopular, ordenó la suspensión temporal del mercado de pulgas que se desarrolla todos los jueves en varios tramos de calles y avenidas que delimitan al sector Pueblo Nuevo.
Un memorándum firmado por el administrador del municipio, advierte a los ya miles de negociantes de uno y otro sexo, en su mayoría haitianos, y criollos procedentes de muchas ciudades de la nación, que desde el próximo jueves 24 de agosto, se clausuran momentáneamente las actividades comerciales en la mencionada demarcación.
En el documento se argumenta, que las transacciones comerciales que de manera informal se llevan a cabo entre las avenidas J. Armando Bermúdez, 27 de Febrero, calles 30 de Marzo y Restauración, violan todas las normas municipales.
Como era de esperarse, negociantes reaccionaron molestos con la disposición, porque cada jueves obtienen parte de los recursos con los cuales encaran el presupuesto de sus familias, por lo que esperan que se les dejen en el lugar, o los ubiquen en otra zona.
