El Consulado de República Dominicana en Barcelona se ha puesto a disposición de la familia del compatriota Leonardo Michael Flores Ozuna, el rapero Monkey Black, pero esperará a hacer la repatriación a que concluyan las diligencias de investigación y que los familiares lo pidan oficialmente.
Según ha explicado un portavoz del Consulado, la familia todavía no ha pedido oficialmente la repatriación, aunque sí se ha mantenido contacto con la esposa de Monkey Black, que vive en Barcelona, de quien estaba separado pero seguían oficialmente casado. Por el momento, se tendrá que esperar a que concluyan todos los trámites de investigación y que los Mossos d’Esquadra y las autoridades judiciales den su visto bueno a la repatriación, ha indicado la citada fuente.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión dominicana Sin, la madre ha pedido que los restos de su hijo sean traídos a su país, y su padre y manager, José Altagracia Fabián, también explicó al Canal 11 que mantenían con él contacto telefónico pero hacía un tiempo que le costaba contactar con él. Leonardo Michael Flores Ozuna, de nacionalidad dominicana y 27 años, murió la noche de este miércoles en una pelea producida en la calle Onze de Setembre de Sant Adrià de Besòs (Barcelona).
Flores resultó mortalmente herido por arma blanca tras verse envuelto en una pelea sobre las 21.20 horas, y los servicios médicos que se desplazaron rápidamente al lugar no pudieron hacer nada para salvar su vida. Trataron de convencerle para que volviera Según la entrevista al Canal 11, un promotor musical y amigo del cantante, Santiago Matías, ha explicado de que trataron de convencer a Monkey Black de que regresara a su país porque consideraban que “estaba perdiendo el tiempo en España y ha sucedido lo peor”.
Las redes sociales han recogido numerosas muestras de solidaridad y conmoción por la muerte del cantante de ‘El sol, la playa, un tro de vaina’, que según varios medios estaba preparando un nuevo disco.
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