Stephen Curry y Steve Kerr fueron multados ayer con 25.000 dólares cada uno por la NBA por los incidentes que protagonizaron en el sexto partido de la final entre sus Warriors de Golden State y los Cavaliers de Cleveland desarrollado el jueves.
Kerr fue multado por criticar públicamente a los árbitros después del encuentro, que Cleveland ganó 115-101 para extender la serie a un séptimo y decisivo partido.
Curry fue multado por lanzar su protector bucal a las gradas después de salir del encuentro por acumulación de faltas cuando restaban 4:22 del último parcial.
El séptimo partido es el domingo en Oakland, California.
