miércoles, 25 de marzo de 2015

Francia abre la caja negra del avión, aísla zona del choque.


Investigadores franceses abrieron el miércoles la deteriorada caja negra del avión alemán que se estrelló en los Alpes con 150 personas a bordo, y aislaron la escapada zona de montaña donde se registró el accidente.

La grabadora de voz de cabina, golpeada y abollada en la colisión, estaba siendo examinada por investigadores para obtener pistas de qué causó la caída del Airbus 320 de Germanwings el martes, luego de que los pilotos perdiesen el contacto por radio mientras sobrevolaban los Alpes franceses durante un vuelo rutinario entre Barcelona y Duesseldorf. El máximo responsable de seguridad alemán dijo el miércoles que no había indicios de sabotaje.

Varios helicópteros sobrevolaban desde el amanecer los escombros dispersos por la ladera, mientras los rescatistas ascendían hasta el remoto lugar entre la lluvia y la nieve recién caída. Estaba previsto que las afectadas familias y los mandatarios de Francia, España y Alemania llegaran al lugar a lo largo del día.

"La caja negra está dañada y hay que reconstituirla en las próximas horas para que sea utilizable", explicó el ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, a la radio RTL.

Resulta clave descubrir lo que ocurrió en el minuto en el margen entre las 10:30 y las 10:31, indicó a su vez Ségolène Royal, ministra francesa responsable de Transportes. Los controladores aéreos perdieron en ese momento el contacto con el avión.

La grabadora de voz recoge el sonido de cuatro micrófonos dentro de la cabina y graba todas las conversaciones entre los pilotos, con los controladores y cualquier ruido que se oiga en la cabina. La agencia francesa que investiga los accidentes aéreos difundió imágenes de la carcasa naranja, abollada y marcada por el impacto.

El dispositivo que registra los datos de vuelo, que según indicó Cazeneuve no se ha recuperado aún, almacena datos de 25 horas acerca de posición y estado de casi todos los componentes importantes del avión.

La fuerza aérea gala dijo haber enviado a la zona un avión de combate Mirage cuando se perdió el contacto con radar con el vuelo, pero que llegó demasiado tarde para ayudar.

El ministro alemán del Interior, Thomas de Maiziere, dijo a la prensa en Berlín que "según la última información, no hay pruebas de que el accidente fuera provocado de forma deliberada por terceros". Tanto Royal como Cazeneuve hicieron hincapié en que parece improbable que el siniestro tenga alguna relación con el terrorismo.

El impacto contra la montaña dejó trozos de fuselaje "tan pequeños y brillantes que parecen parches de nieve en las montañas", dijo Pierre-Henry Brandet, portavoz del Ministerio del Interior, tras sobrevolar los restos.

Los expertos que recuperarán los datos de la caja negra se centrarán primero "en las voces humanas, las conversaciones", y después en el sonido de cabina, explicó a la cadena de radio Europe 1 el secretario de Transportes, Alain Vidalies. El gobierno tiene previsto hacer pública la información obtenida del dispositivo en cuanto pueda verificarse, añadió.