Santiago.-Las precariedades en que se desenvuelven los bomberos podría dejar al borde del cierre de la estación de Gurabo, mientras el edificio central que levanta la alcaldía lleva ya cuatro años paralizados y sus oficinas ocupadas por ilegales.
La falta de equipos impide que puedan muchas veces ofrecer el servicio cuando se registran fuegos.
En total, el municipio cuenta con siete estaciones, cuatro que reciben apoyo de la Alcaldía, la principal ubicada en la calle 30 de Marzo y las sub estaciones de Nibaje, Gurabo y Cienfuegos.
Las otras tres están ubicadas en las empresas de zona Franca Víctor Espaillat Mera, el parque Pizano y una tercera construida por una envasadora de gas en la avenida Estrella Sadhalá cercano a la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra.
En la estación de Gurabo apenas cuenta con ocho bomberos, encabezado por el teniente coronel Luis Cabrera. Apenas cuenta con dos camiones, uno que permanecen dañado desde hace siete meses y el otro lleva tres meses destartalado.
La estación fue levantada por el empresario José Clase y dependen de un patronato y la ayuda de la alcaldía, pero en los últimos tiempos no recibe un centavo.
“Si se produce un fuego, tenemos que llamar a la estación central o las vecinas, porque tenemos meses con los equipos dañados” apunta cabra al conversar con reporteros de El Caribe.
En el caso de la estación central iniciada por la gestión municipal de José Enrique Sued permanece arropada por la maleza, a pesar de que se encuentra en prácticamente un 80 por ciento en etapa de terminación. Un total de diez haitianos que laboran en construcciones cercanas han tomado las oficinas como habitaciones a donde puedan pasar la noche.
Algunos vecinos también lo han tomado para guardar el cemento y varilla de las construcciones que realizan. La única respuesta que tiene la alcaldía desde hace tres años, es que la estación fue levantada en zona de alto riesgo.
Actualmente, el cuerpo de bomberos cuenta con 191 empleados. El coronel Ricardo Rosario, reconoce las precariedades en que se desenvuelven. Dice que carecen de equipos para amagar fuegos en caso que se registren incendios de plástico como recientemente ocurrió en Santo Domingo. En el parqueo del cuerpo bomberil la mayoría de ambulancia otros vehículos permanecen deteriorados.
